También denominado surco nasolabial, son una de las primeras arrugas de expresión que aparecen en el rostro debido a la cantidad de músculos que tenemos en la boca y los movimientos que realizamos al sonreír, provocando que esta área facial adquiera un aspecto triste y cansado.
Debemos entender el pliegue nasogeniano como un triángulo isósceles, siendo su base el área hundida y la que debemos corregir hasta igualar la parte superior de dicho triángulo. Utilizaremos ácido hialurónico inyectando de forma profunda con aguja y subdérmica con cánula en el canal lagrimal para tratar de revertir los daños de la piel que han provocado el surco y así obtener un aspecto descansado y rejuvenecido.
El relleno de surcos nasogenianos no tiene ningún efecto secundario salvo pequeñas reacciones inflamatorias locales que pueden estar acompañadas de irritación o presión, sin embargo, su aparición es temporal y pasa rápidamente. Técnicamente el facultativo debe tener especial atención a la arteria facial evitando inyección intravascular.
Consejos para después del tratamiento:
- Preferiblemente recomendamos no frotar la zona ni hacer deporte o movimientos bruscos con la cabeza durante las 4 horas posteriores al tratamiento con toxina botulínica.
- No debes ponerte casco al salir de la consulta porque presionaríamos el producto hacia abajo y podría migrar a otras zonas.
- Es recomendable realizar en los días posteriores movimientos faciales forzados para potenciar la acción de la toxina.
Resultados: Inmediato
Aplicación: 30 minutos
Duración: Hasta 12 meses
Anestesia: No necesaria